La guerra por la verdadera libertad económica
Publicado originalmente en El Independent
Quisiera iniciar con una frase que el profesor Joel Torrez dijo en la presentación del libro ”Por qué la Libertad” del Dr. Tom Palmer en la biblioteca de la Universidad Centroccidental Lisandro Alvarado, frente a un público de aproximadamente 100 estudiantes. “Tenemos que ser pobres para que el Socialismo funcione”, este pensamiento resume perfectamente lo que busca el socialismo y cualquier sistema o propuesta que pretenda mantener algún tipo de control, es decir la planificación central de la economía.
Muchos pensarán que no tengo otra cosa que escribir. Y no es cierto, hay muchos temas en los cuales quisiera plasmar ideas y presentar mi opinión al respecto, como por ejemplo, qué habrá pasado con el amigo y Teniente Coronel Rafael Ernesto Díaz Cuello, por qué ningún político ha salido a hablar de su caso, etc… O sobre el espectacular trabajo que está realizando Econintech en Venezuela, una ardua tarea educativa presentando los libros editados por el Atlas Network, organizando seminarios, conferencias, dándole una esperanza al Venezolano que aún sigue en nuestro país o mis presentaciones en el Florida Southern College, University of Miami, Mises Institute y el Free Market Institute. Sin embargo, creo que en este momento la situación me obliga a escribir sobre algo en lo que quizás puedo ser más útil, si me lo permiten, y es analizando, proponiendo y explicando el porqué es necesaria la guerra por la verdadera libertad económica.
Es muy preocupante el nivel en el que se ha llegado a establecer una batalla campal entre las redes sobre quién es el más o menos sabio, capaz, preparado, etc… en un área crucial como lo es la economía. La situación actual de Venezuela no es para “caerse a piña” con los títulos, artículos o CVs de aquellos que opinan algo, intentan proponer o trabajan en una futura reinstitucionalización del país. Es momento de que el ciudadano, de manera individual, analice las propuestas, entienda la situación y establezca qué es lo que mejor le conviene primeramente a él como persona y que no afecte a sus semejantes. Debemos entender que el buen economista no es el del mejor título, sino aquel que antepone la libertad ante todo, sabe y acepta, humildemente, que nadie tiene la sabiduría para poder regir el destino económico de sus semejantes.
Es decir, los Venezolanos deben dejar de seguir esos influencers que se desviven por desbordar las redes con sus pensamientos, que lo único que tienen como objetivo es ganar más adeptos y simpatizantes. Lamentablemente hay algo que debemos entender, jamás se podrá complacer a todo el mundo y cuando alguien trata de hacerlo es cuando observamos esas posturas cambiantes tan abiertas que pareciera demostrar una inconsistencia en la credibilidad de sus propias ideas y propuestas. Existimos tres tipos de personas dedicadas a la economía, los que defendemos realmente la libertad y por lo tanto no nos interesa caerle bien a todas las personas y solo decimos lo que se tiene que decir, los que se dedican a vender al mejor postor su profesión y los que quieren ser Ministros -lamentablemente muchos-.
Indiscutiblemente la libertad económica no puede ser a medias. No es posible que haya alguien que pretenda rasgarse las vestiduras por defenderla pero que a la vez quiera mantener el control en algún aspecto de la economía. Los individuos deben tener la capacidad de elegir totalmente entre sus preferencias siempre y cuando esto no afecte la libertad de sus semejantes. En Venezuela no necesitamos otro Simón Bolívar diciendo que “el pueblo de Venezuela no está preparado para el supremo bienestar de la libertad”, lamentablemente el padre de la patria pareciera que maldijo a Venezuela al decir eso porque aún en nuestra época existen muchos que piensan lo mismo.
Por tanto, mi artículo es una reflexión para que entendamos que debemos saber elegir la mejor opción. Cada individuo será realmente libre cuando asuma responsablemente la defensa de sus propios derechos y asuma su libertad individual sin menoscabar la de su prójimo. Los Venezolanos deben hablar menos de “Derechos Humanos” y entender que necesitamos es resguardar contra cualquier tipo de ataque nuestros “Derechos Naturales”. Muchos se sentirán ofendidos porque antepongo, siempre lo hago, la defensa de nuestros tres únicos e inalienables derechos, Vida, Propiedad Privada y Libertad, sin embargo allí es que está la razón del éxito en los países que han logrado el avance y desarrollo que tanto queremos para nuestra Venezuela.
Nunca he tenido la intención de “vomitar” una serie de títulos y autores en mis escritos. Creo que eso se debe dejar para las aulas de clases. El ponerse a “mandar a leer” los “miles de libros” que han leído, analizado, devorado, etc… no hace nada. Nadie puede negar que Chomsky ha leído muchísimo, que Rómulo Betancourt escribía en una prosa bastante digerible, que Stiglitz y Kraugman son muy reconocidos y respetados académicos, pero a pesar de todo eso no dejan de ser unos simples socialistas. El Socialismo puede tener varios inicios pero siempre tienen el mismo final, la miseria. Para que seas un verdadero liberal clásico o libertario no tienes que leer una biblioteca entera sobre las raíces del liberalismo, no, pues con sólo defender tus derechos naturales y respetar los derechos de los demás les aseguro que están siendo más liberales clásicos y libertarios que muchos que se regodean demostrando sus innumerables lecturas y/o titulaciones.
Para cerrar quisiera también hacer referencia a un punto que ha sido álgido últimamente. Mucho se alega al principio de “no agresión”, es decir un liberal clásico y/o libertario no debería agredir a nadie, es correcto, sin embargo también existe el principio de la “autodefensa” es decir, si me han ofendido si me están atacando y veo que alguno de mis derechos están en riesgo indiscutiblemente es totalmente aceptado, y obligatorio, por cualquier liberal clásico y libertario el ataque en favor de la defensa de la libertad. Habría que preguntarle a los Salmantinos si no es viable una “eliminación” de una plaga como el chavismo y el colaboracionismo rampante en la política Venezolana. Así pues, compañeros liberales clásicos y libertarios, continuen en la lucha, sigan haciendo uso de la “autodefensa” no importa si por los momentos no se cuentan con las “herramientas” necesarias para hacerlo en la vida real, mientras tanto… “Social Media Go to War…”